Así se justificó Hiroshima, sin ir más allá
¡Qué triste! ¿cierto?? pero real. Por otra , mucha gente desde mi pequeña urbe natal latinoamericana, se preocupó por llamar muy frecuentemente. Mucha gente probó su cariño ilimitado y se formaron cadenas de oración primero por mi vida y luego por mi restauración.
