Aquí puedes ver los comandos engastados y sentir esa atracción
La piel habla a través de su fragancia, del roce, lanza mensajes que atraen y rechaza, se vuelve un radar para nuestras relaciones primarias y rutinarias, tenemos que oírla, cuidarla y conducirla para que la persona que esté cerca de nosotros pueda percibirla y desde entonces, quererla